En la actualidad, existen diversos métodos y recetas que se han vuelto populares debido a su capacidad para ayudar a las personas a reducir su porcentaje de grasa corporal. En este artículo, te presentaremos una receta infalible para aquellos que desean perder esos kilos de más: el licuado de avena y manzana, una combinación ideal para alcanzar tus objetivos de pérdida de peso.
Tanto la manzana como la avena contienen propiedades beneficiosas para las personas con sobrepeso y, además, resultan deliciosos alimentos que pueden ser incluidos en cualquier dieta.
Este licuado de avena y manzana tiene un impacto positivo en el funcionamiento del sistema digestivo. Si buscas obtener resultados satisfactorios en tu intento por perder peso, definitivamente deberías considerar combinar la manzana con la avena. Se aconseja tomar este licuado en las primeras horas de la mañana, antes de la primera comida del día, incluso puede ser una excelente opción para el desayuno.
Una de las ventajas más destacadas es el beneficio para el sistema digestivo al consumir ambos ingredientes. Al empezar a tomar el licuado, notarás una disminución en la inflamación abdominal y, además, reducirás el estreñimiento. También te sentirás saciado durante el día, lo que te ayudará a evitar la ingesta de otros alimentos que puedan obstaculizar tu objetivo de perder peso.
Además de ser una ayuda en la pérdida de peso, el licuado de avena y manzana también aporta beneficios para la salud nutricional en general. La avena proporciona al organismo ácidos grasos y Omega 3, así como vitaminas y minerales esenciales, lo que favorece la absorción lenta de los alimentos. Por su parte, la manzana, rica en fibra, funciona como un excelente método para desintoxicar y mantener el estómago ligero.
Aquí tienes la forma correcta de preparar el licuado de avena y manzana para perder peso:
- Reúne los ingredientes necesarios: avena y leche. Es importante que la leche no contenga azúcares añadidos, ya que el objetivo es reducir el consumo de grasas.
- En la licuadora, coloca media taza de avena y media manzana. Agrega la leche y licua hasta obtener una mezcla homogénea. Puedes optar por utilizar manzana verde o roja, según tus preferencias.
Si eres intolerante a la lactosa, puedes preparar la avena con manzana sin leche. Simplemente mezcla la avena con la manzana y añade un poco de canela al gusto para darle un toque dulce.
Una excelente opción es preparar el licuado la noche anterior para disfrutarlo bien frío en las primeras horas de la mañana. La mezcla de avena y manzana licuada puede conservarse en el refrigerador durante 4 días, lo que te permitirá tener un suministro listo para tomar a lo largo del día.
Con esta sencilla y saludable receta, podrás incorporar el licuado de avena y manzana en tu dieta y aprovechar sus beneficios para alcanzar tus metas de pérdida de peso de manera efectiva.